Daniel Espinosa: La diferencia entre llevar un accesorio y sentir el poder una joya.

El poder de una joya

Por Yohali Resėndiz

El espejo jamás engaña, aquella gargantilla le quedaba divina. "La verdad, es que hace muchos años que los diseños de Daniel ¡me encantan!, a veces pienso que cada joya fue pensada para mi", dice una de las fieles mujeres que ha sido invitada a la joyería ubicada en un centro comercial al Sur de la Ciudad de México a la presentación de la nueva colección "Destellos Boreales" by Daniel Espinosa.

La gargantilla sigue puesta en su cuello y ha pedido a Yolanda, -vendedora de gran experiencia- el juego de aretes y pulsera. -¿Gusta usted una copa de vino? Le dice un mesero. -"El vino es el complemento perfecto", responde la fina dama.

Era una noche, para admirar diseños vanguardistas con perlas, cadenas e incrustaciones de piedras semipreciosas que ha convertido a la marca Daniel Espinosa en el complemento perfecto de cientos de mujeres.

"¡Se te ve divino, yo me la llevaría sin pensarlo!" le dice otra mujer que ha pedido a Leopoldo, encargado de la tienda, que le muestre un collar de perlas con la letra R en manuscrito en plata.

-¿Cómo te llamas? María Isabel.

-Yo me llamo, Rocío. Ambas mujeres platican de las distintas joyas que cada una tiene en aquel cofre de tesoros en casa, mientras disfrutan de una exquisita variedad de canapés de carnes frías. En otro mostrador, la historia se repite, una mujer ha pedido una pulsera igual a la que luce la edecán y también la pulsera que le ha visto a la anfitriona de esta noche, Patricia Maciel.

"Siempre he admirado la lucha de las mujeres que enfrentan enfermedades difíciles. Tengo una amiga que recientemente venció al cáncer, así que le llevaré una pulsera a ella y me llevaré otra yo, como un símbolo de amistad" dice Esther, mientras da un sorbo a su copa de vino.

Afuera, bolsas van y vienen, pero adentro de esta joyería las mujeres que han sido fieles a los diseños de Daniel Espinosa se dan la oportunidad de algo impensable: conversar, conocerse por unos minutos y ayudarse cuando llega el momento de elegir para ganarle a la indecisión.

-"Los aretes se te ven hermosos, elegantes, los luces muy bien" le dice Manuela a Rocío.

-"¡La verdad es que venía solo por un collar y mi letra pero estos aretes de plata me atraparon y me los voy a llevar! Dice sonriendo.

La plata, es el metal favorito y base de estas boutiques y cada pieza es una joya con arte y creatividad. El nombre de Daniel Espinosa no sólo evoca al mejor diseñador de joyería mexicana sino al deseo de las mujeres por portar sus accesorios que van desde una edición especial en un brazalete hasta recordar que Daniel Espinosa con trabajo, esfuerzo y dedicación fue el diseñador responsable y elegido para la réplica del collar de la película Titanic de James Cameron, "Le coer de la mer" a 15 años de su estreno. Sin duda, orgullo mexicano.

En todo el mundo, los diseños del reconocido joyero mexicano han sido admirados, pero México, sigue siendo el mercado "consentido" simplemente porque lo ha visto nacer y crecer. Así que, en una noche donde las clientas conocen la nueva colección "Destellos Boreales" al mismo tiempo se les consiente con un copa de vino donde el revolucionario de la plata les hace sentir lo importantes que han sido ellas a lo largo de esta carrera de sueños.

"Un clásico de Daniel que amo es la gargantilla de la colección "Poison", mi esposo me la regaló durante un viaje cuando cumplimos 25 años de casados, prácticamente los diseños de Daniel me han acompañado en cada celebración importante, en la graduación de mi hija y en la boda de mi hijo, luego en el bautizo de mi nieto y hace poco en la celebración de mi aniversario de bodas, siempre vuelvo a la tienda, convencida de que me llevaré una joya preciosa" dice Antonieta, quién hace varios años visita la tienda y ni siquiera conocía que Yolanda, era el nombre de su vendedora.

Lo mejor de la noche, es que decenas de clientas constataron una vez más, que la plata, aquel metal que Daniel Espinosa rescató y le ha dado brillo y prestigio, es parte de nuestra cultura mexicana. Cada diseño exhibido en sus vitrinas dan a quienes las portan la diferencia de llevar un accesorio o sentir el poder de una joya.

¡Salud, Daniel Espinosa, por los éxitos hechos diseños!