Por Yohali Reséndiz
Se llama Nely Reséndiz, tiene 30 años, durante seis años y medio vivió con René González Pedroza de 41 años, repartidor de productos Marinela.
"Teníamos 6 meses separados. Decidí dejarlo porque era muy celoso, no me dejaba tener amigos, ni ir con mi familia, ni salir, se molestaba si yo me arreglaba, hasta para ponerme unas zapatillas tenía que pedirle permiso. Siempre me decía, que todas las que se ponían tacones eran putas y cuando me arreglaba era porque iba a salir con él y me autorizaba la ropa"
El pasado 13 de septiembre Nely lo dejó. "Él se iba a fiestas y yo lo esperaba en casa, ya era frecuente, a mí ni siquiera me invitaba al cine, pero él si salía con sus amigos. Aquella vez llego con un amigo ya en la madrugada y no lo dejé entrar, ya me celaba por todo, hasta con mis tíos"
Hace unos meses, Nely tenía que comprarle un uniforme a su hijo y uno de sus tíos se lo compró. "Cuando René, se enteró me preguntó que cómo le iba a pagar el favor a mi tío y yo le respondí que ya le estaba lavando y planchando la ropa y el me dijo que no me creía, que seguramente yo le pagaría de otra manera".
Después de dejar a René, Nely comenzó a resolver sus asuntos. "Entré a estudiar computación, entré a trabajar, yo realmente estaba mejor con mi hijo de 11 años, conseguí un trabajo en ventas, me iba bien, era feliz".
El pasado miércoles, René se presentó en el trabajo de Nely diciendo: ¿qué pasa contigo? delante de sus compañeros le dijo que ya sabía que tenía un nuevo celular y le exigió que se lo diera. La Jefa de Nely se acercó a ellos y les dijo que si querían resolver algún problema esperaran a la salida. René se calmó, le dio besos en la frente y le suplicó que hablaran y la cito en el metro Coyuya porque ahí había dejado su carro. Nely aceptó.
"Yo lo único que quería era tranquilizarlo, hablar con el de que ya no era posible que me lastimara y maltratara así".
Nely llegó a la hora acordada al metro Coyuya y una vez dentro del carro, René comenzó a reclamar: "Seguro ya tienes un amante, se te ve porque te vistes como una puta", Nely comenzó a suplicarle que no la ofendiera pero René continuaba:"Además tu debes de estar como todas las mujeres, en su casa y esperando al marido, yo te quiero para mí, deja de hacerte pendeja, yo sé que tú me engañas" y finalizó diciendo:mira, si no regresas conmigo, quiero que me regreses la ropa, zapatos y muebles que te he comprado todo este tiempo que hemos estado juntos". Nely aceptó. René enfureció.
La negativa de Nely de regresar con él lo volvió loco de celos y comenzó a gritarle mientras manejaba: "Aunque yo vaya a parar al reclusorio, yo me voy a ir con la idea de que ya no serás de nadie, ya te cargó la chingada, y de aquí vas a bajar solamente muerta" por favor, René, suplicaba Nely mientras intentó varias veces bajarse del vehículo.
René enfurecido se orilló y comenzó a jalarla de los cabellos y a pegarle y le decía:"Esto ya valió madre, y ahorita nos vamos a ir a un hotel y ahí te vas a chingar a tu madre y si me animo hasta me mato yo, nadie sabe que estamos juntos, así que ya te cargo la chingada"
Mientras golpeaba René a Nely ella intentó varias veces escapar del carro hasta que lo logró:"Como pude me bajé del carro y comencé a pedir ayuda, entonces se acercaron unos jóvenes para auxiliarme". René también se bajo del carro y gritó que nadie se metiera porque ella era su esposa y la había descubierto engañándolo.
Al sentirse más segura Nely pidió un celular a una persona y se comunicó con su familia. Se resguardó con unas señoras, mientras llegaban sus familiares. Horas después levantó una denuncia en la Procuraduría de San Agustín, en el Estado de México con número de expediente: 344760620100914 y aún cuando Nely les dijo que René la quería matar y llevarla a un hotel, el Ministerio Público, Lic. Diego Armando Sánchez Galicia, le respondió a Nely que solo se levantaría una denuncia por lesiones ya que la amenaza de muerte no procedía.
Al día de hoy, René ha intentado en dos ocasiones llevarse al hijo de Nely y se ha acercado a su domicilio, incluso llama por teléfono.
"Estoy escondida, no puedo salir, a mi hijo lo saqué de la escuela, me quedé sin trabajo. Mientras él está trabajando como si nada y se aparece cada que quiere". Las autoridades cuando levanté la denuncia me dijeron que puedo pedir una orden de protección, pero de que me sirve si René me dijo:
"No voy a descansar hasta matarte" tengo miedo, de que me mate y no sé que hacer.
¿Tienes una denuncia? periodismoatodaprueba@gmail.com
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